domingo, 1 de septiembre de 2013

Sin Palabras

Hola, vaya he estado fuera exactamente dos meses, no saben como he extrañado escribir, solo no había sentido que algo satisfactorio saliese de mi tinta, hasta que apareció esto que espero les guste.

Sin Palabras

No procuramos palabras
Nos hablamos en silencios
Dejamos expresiones banas
Para vernos con ojos despiertos

Te siento, te respiro
Te evaporas en la piel
Como el alcohol de tu perfume
Como las gotas de rocio

Quedate en mi mente 
Impregnate en mis ropas
Dejame sentirte amor mio
Y llevarme lo que te agobia

Te necesito en mi infortunio
En mi corazón insalubre
En mi andar a tientas
En mi pensar sombrío

                      Abraham Paz 

lunes, 1 de julio de 2013

Decidir el destino

Hola de nuevo, segunda entrada esta semana, esta vez he querido mostrarles un poco más de como soy, como llevo la vida, espero les guste.

Decidir el Destino

No soy quién para decidir el destino
No lo soy, y no planeo serlo
Soy de los que no solo viven
Ni piensan, ni planean

Soy de los que va
Como el agua
De los que corren
Sin ver donde parar

Planeo a mi manera
Esperando lo inesperable
Prolongando la agonía
Mientras la veo llegar

Pero esa espera me alimenta
Puedo ver como fluctúa, crece
¿Quien soy yo para el destino
Si el decide cuando amanece?

                                Abraham Paz


domingo, 30 de junio de 2013

La Espera

Hola, hoy traigo otra pequeña dosis de romanticismo insomne, esas verdades que llego a saber de la vida aunque a veces no lo quiera...

La Espera

Distancia ingrata
Mi deseo es pecado
La esperanza murió por nada
Como tantos mueren en vano

Amarte con idiotez
Es lo mas tonto que he hecho
Nunca llegaste ni dejaste nada
Sin embargo, me siento deshecho

No preciso recompensa
Ni caprichos, ni presagios
En realidad no quiero nada
Si no está entre tus brazos

Me siento febril amor mio
Y triste, y desgraciado
¡Oh que esperar tan dulce!
Si es para tenerte a mi lado

Y si la rivera de mis mañanas
Me permite algún día estarlo
Seré feliz amor mio
Feliz como nunca he estado

                          Abraham Paz



jueves, 30 de mayo de 2013

Fotografía

Hola, tiene casi una semana que escribí esto pero por un motivo u otro me vi incapaz de subirlo. En fin, esto es sobre melancolía y notar que por mas que se quiera lo perdido, perdido está. Ojala lo disfruten.

Fotografía

Quiero capturarte en recuerdos
Sacarte de monotonia y traer color
Quitarnos de blancos y negros
De agonía y de noches de calor

No quiero ser esa fotografia
Que yace olvidada en un cajon
Esa que no le enseñas a tus amigas
La que es solo un recuerdo de antaño

Ahí estamos tu y yo, abrazados
Pero ya no soy mas que un pie de foto
Una cara sin nombre, vacia, sin ojos
Eso soy si no es que soy menos

Al final entre penumbras solo observo
El resplandor de tus ojos en el vacío
Te veo a travez del papel fotográfico
Y me pregunto si es que te quiero

¿O solo me alimento de tus ansias?
Solo nos vemos con el corazón partido
Contando con las manos las pocas ganas
De recuperar finalmente lo ya perdido

                              Abraham Paz 


domingo, 28 de abril de 2013

Vacilando de Incertidumbre

Hola, hoy ando un poco pensante y lleno de cafeína, me pongo a divagar y como siempre cierta persona saltó en mi mente.

Vacilando de Incertidumbre.

Estoy flotando en incertidumbre
Del tal vez, del quizá
Ando como vacilando
En lo que puede ser y parece será


Quisiera pretender que no eres
La riviera de mis madrugadas
Y que no soy como una espiga
Que vigila sola el alba


Estoy lleno de esperanzas rotas
De vigilias sin sueño
De miserias ajenas
Y algún tonto recuerdo


Tanto que ya no suelo pensar
Si te tengo o no te tengo
Me retengo al pensar
Que encontrarás a alguien ajeno


Alguien que te tome de la mano
Y te lleve a pasear
Que no te llene de inuendos
Que no te quiera apresar


Abraham Paz




lunes, 22 de abril de 2013

Amor sin sigilo.

Hola, anoche tuve una ola de inspiración, de esa que no te deja dormir hasta que la sacas de alguna manera. Y entre todo ese caos esto cayó a mi cabeza.

Amor sin sigilo.

Maldición, ahora si estoy jodido
Jodido, pero no como antes
Jodido de lo hermoso que es
Verte mas no tenerte a mi lado

Amarte y no sentir tu perfume
En la almohada, en la sabana de seda
Mas sentirme acomedido
A velarte en esta gran ausencia

¿Será ausencia si nunca estuviste?
Si solo apareciste como una parvada
Y sin embrago no te fuiste jamás
No pusiste pie fuera de mi alma

Oh carajo, se que te amo
Te amo con nada contado
Te amo con nada perdido
Te amo de amar sin sigilo

Porque sigilo no es estar
En calma bajo la tormenta
Sigilo es sentir y esperar
Esa oportunidad perfecta

Y si la perfección es como vos
Entonces la perfección no espera
Y el sigilo es inutil ya
Como todo lo que me queda


                                          Abraham Paz


lunes, 25 de marzo de 2013

Se vende

Hoy en día no sé que es real y que es provocado, solo sé que queramos o no todo se vende.

Se Vende 

¿Que se vende?
Se vende café
Se vende amor
De mujeres nocturnos
Victimas de algún embauco
O alguna decepción 

Callejuelas vacias
Llenas de pudores
De susurros o quizá
de alguna maldición

Se vende el cantar,
El actuar, el recitar
Se vende el salario
Se vende el caminar

De algun tipo a oscuras
Que encuentra desahogo
Solo al andar y andar
Como quien busca el sol

Todo se vende
A veces hasta la dignidad

                       Abraham Paz


viernes, 15 de marzo de 2013

Dudas, benditas dudas.

Hola, dudas, benditas dudas, malditas dudas, dudas existenciales, dudas maritales, dudas religiosas, dudas científicas  dudas imparables, dudas putas.

Dudas

Como que quiero mandar todo al carajo
A ti, a mi, al sistema, a la sociedad
Es que estoy cansado de arrastrarme en vano
Siendo que nunca me llegarás a amar

Lo enmarcan las sombras de mi pasado
Siempre he sido torpe, bruto animal
Que ama antes de lo planeado
Que baja la mirada siempre al caminar

Ya no quiero llorar, ya no quiero sufrir
Ni siquiera se si quiero volver a respirar
No se si vale la pena vivir así
¿No debo sentirme vivo para andar?

Quizá...
No sé...
Tal vez...
Y si...
            Abraham Paz


sábado, 9 de marzo de 2013

Tropos en la luna

Pues sigo con mi ciclo romántico (Ni siquiera recuerdo cuando empecé)  les dejo una odisea espacial, al menos si así quieren verlo, en fin, saben que los adoro y a sus mentes vacilantes. Solo lean y gocen.

Tropos en la luna


Podemos balancear la luna
Estando en su cuarto menguante
Podemos estar y no soltarnos
Cual nuevos onerosos amantes 

Sentirnos y definirnos
Seguir este ritmo andante
De compasión, de pudor
Que envuelve un manto errante

Adorarnos, querernos
Quemarnos bajo el sol radiante
Besarnos y suspirar
Como si el mañana fuese un instante

¿Y si bailamos?
Ese tango que quiero tocarte
¿Y esa sonrisa?
Creo que voy a desmayarme

                      Abraham Paz


viernes, 8 de marzo de 2013

Soñé que te besaba

Hola, por fin creo haber salido de mi bloqueo y les traigo algo nuevo. Es sobre esos sueños que deseas con toda el alma sean premoniciones. En este caso el estar con ese ser amado que no se encuentra con nosotros. Espero les guste o al menos me comprendan

Soñé que te besaba 

Soñé que te besaba
En un amplio sofá blanco
En el medio de una sala
Estábamos lado a lado


Recuerdo que llorabas
Decía que me debía marchar
Pedías que no me marchara
Que esto tenia que continuar


Que tu padre no estaba
Por trabajar u otra cosa
Y que a tu madre lastimaba
Así tu no querías estar


Pedías que me quedara
Si juntos íbamos a estar
Otro beso en mi plantabas
Yo solo quería pensar


Pero de nuevo fue un sueño
Un sueño y nada mas
La verdad es que no te tengo
Ojalá fuese realidad

                               Abraham Paz



lunes, 4 de febrero de 2013

¿Como te lo explico?

Hola, estos últimos días he estado imparable en cuanto a escribir se refiere. Tal vez sea la nostalgia, el clima, la comida o algo.

¿Como te lo explico?

¿Como te lo explico?
Han pasado un par de años
Y honestamente me estoy cansando
Cansado de andar y no encontrarte

Quizá estás al pie del mar
O a la sombra de un árbol
Yo solo se que a tu lado
El futuro parece mágico

Me abrazas y me alientas
E iluminas mi camino
Yo soy uno contigo
Para soltar juntos el pasado

Tráeme tus palabras 
Tus buenas nuevas
Que iluminan el mañana
Con candela propio

Que yo las recibiré
Como a esas rosas
Que pienso darte
Junto con mi alma

¿Como te lo explico?
Yo sin ti no soy nada
Quiero abrazarte como nunca
Cuando durmamos de madrugada

                             Abraham Paz



sábado, 2 de febrero de 2013

Adicción a ti

Hola, hoy me siento muy solo y algo triste, revisé mis trayectos de las ultimas semanas y no pude evitar notar la futilidad de los mismos. El único pequeño resplandor que tengo es su recuerdo, en fin, escribí esto:

Adicción a ti


Esta noche no quiero pensarte
Es ridículo abrazarme a tu figura
Iluminarme en tu recuerdo
O enclaustrarme en mi mente

Sin embargo esta merced
Parece interminable
Estás en mis parpados
Estás también en mi sangre

Y en mis andares diarios
No hago mas que acariciarte
Aunque sean tontas o irreales
Mis fantasías solo pueden apresarte

Ingenuo es imaginarme
Nuevos trayectos contigo
Estar juntos es imposible
Mejor ni hablar
De que puedas amarme

Quiero envolverme en adagios
De una melodía incesante
Tener un compás caminante
Que me lleve a donde estás

Y llenarme de ti
Darle otra dosis a mis venas
Para morir feliz
Unido a ti de manera eterna

Adicción a ti
Es lo que me llena
Adicción a nosotros
No es mas que una pena

                           Abraham Paz








jueves, 31 de enero de 2013

Carta a nadie...

Nunca me había esforzado tanto en escribir, hacerlo bien me parece poco. Y aunque las letras sin mi único escaparate, hoy me han llevado a romperme la cabeza. Es que sos tan buena que mi literatura no es suficiente. Quiero rebasarte con palabras y dejar que estas  abrasen tu figura y así quizá por fin entiendas su intención, su poderío, el cariño con que fueron escritas.

Incluso si mis palabras no son mías, si no soy mas que un puente entre ellas y el papel, llevo incrustadas sus marcas en el pecho, su canto de candor. Las silabas quieren tomar vuelo, despegar hacia el gran azul y encontrarte donde quiera que estés, solo para vanagloriarte, quererte, morir en tus manos y caer a tus pies.

Y en mi hito de memorias, yo no veo, sufro tu ausencia. Que es benigna y maligna a la vez. Porque te tengo y no te tengo. Y te amo y no te amo. En este punto ya ni siquiera se si vivo, o solo respiro y suelto nostalgias al viento.

Me parece lindo sufrir por tu ausencia, pero al mismo tiempo me parece ridículo y solitario, melodramático y glamouroso. Se me ocurre que si tocamos el mismo suelo quizá muera de entusiasmo, pero al mismo tiempo tendré un miedo que vive en la incertidumbre de que puedas quererme. Y aunque lo hicieses siempre serias quien quiere menos.

No me lo tomes a mal, solo dudo que puedas quererme tanto como yo te quiero. Dudaría de mi buena fortuna. Tu corazón es como vos. Es un corazón vagabundo, que corre, canta y ama a diario, aunque sea a esas pequeñas cosas. No me queda mas que intentar alcanzarlo, hacer que cantemos al unisono y si va a amar ¿Que mejor que amarnos los dos?

Y si esto llega a tus manos, solo me queda desear que no lo tomes a mal, y que solo me dejes ser sin alertar tus fusibles. Déjame amarte y desear que me ames.

                                                      Tuyo:
                                                              Abraham Paz


lunes, 21 de enero de 2013

Tu Ausencia

Hola lectores, estos días me he amarrado a la soledad y la tristeza. En fin en insomnio lo pasme en palabras.

"Tu ausencia"

Me encadeno a tu ausencia
Que llega y no llega
Que va y no va
Tu ausencia con mirada de tierra

Y guardo en sus adentros
Cosas tuyas y mías
Mis augurios y pronósticos
Tu caminata que lleva a huida

Tu ausencia dice que no estas
Y no estarás en un rato
Así solo queda un sueño grato
Del que no quiero despertar

Por que implica abrir los ojos
Y dejar de cerrar la consciencia
Darme cuenta de mi fatalidad
Del dulce cesar de mi inconsciencia

Solo déjeme llorar
Cuando le llore a ratos
Solo ocupese en llegar
Para nunca mas soltarnos

                             Abraham Paz


martes, 8 de enero de 2013

El inocente

Hola, esta es simplemente una historia que escribí, es algo corta pero eso no es lo importante en una historia espero que la disfruten:

El inocente

Esta es la historia de como me volví un inocente, un crédulo si lo desean.

Todo empezó hace tantos años que ya es ridículo contarlos. Había una mujer, como en casi todas las historias, y para mi era perfecta. Su sonrisa, su aroma a jazmín, el sonido de su risa, la curvatura de sus labios, la redondez de sus senos, su serenidad, su cariño y su temperamento, todo era perfecto, casi como si hubiese sido forjada en el mismísimo cielo para que yo admirara su belleza.

Con una mirada me enamoró, créeme, no necesitaba mas. Intenté por todos los recursos posibles averiguar su nombre, al final no fue mas difícil que darle unas pesetas a un pordiosero, su nombre era Isabel y era la hija de un mercader.

Un día tras verla pasar por la fuente, la seguí hasta su casa. Habrán sido unos veinte minutos de camino, ya el sol brillaba en un crepúsculo anaranjado cuando ella se acercó a su pórtico. Era una casa que resaltaba por no ser ni muy pequeña ni muy grande, como si quien la construyó hubiese querido decir que se podía ser elegante y modesto a la vez. Tras preguntar con unos vecinos, supe que la casa pertenecía a Julio Altamirano el mercader de pescado mas popular del puerto. Isabel Altamirano, hasta su nombre me parecía perfecto.

Podrá sonar perverso pero por un par de días solo me dediqué a observarla. Su caminar alegre, el vaivén de sus cabellos castaños, la manera en que cargaba su canasto siempre lleno de lirios blancos y como se quitaba las migas de pan de la comisura de los labios con un pequeño pañuelo blanco. Solo no tenia el coraje de acercarme. Es difícil de explicar, siempre supuse que su belleza me resultaba abrumadora.

En fin, después de un par de semanas de observación decidí que ya era suficiente, que nunca sabría que iba a pasar a menos que diera el paso. Así que un día simplemente me puse lo mas decente que tenia, claro sin exagerar, solo una camisa verde, pantalones color café, tirantes y zapatos del mismo color. Salí a la calles con aire confiado y la busque por ahí, la encontré sentada en los muelles, vestía un vestido color esmeralda y tenia los pies sumergidos en el agua.

-Hola...- Sofisticado.
-Hola ¿Te estoy estorbando? Disculpa.-
-No... No es eso... Soy Emiliano, pasaba por ahí y te vi... ¿Está todo bien?-
-Así que eres Emiliano, me preguntaba como te llamabas, me di cuenta que me seguías hace un par de días. Empezaba a dudar si me hablarías o algo.- Sentí que el mundo se me venia encima.
-¿En serio? Estoy tan apenado lo siento.-
-Debo decir que al principio me asusté, pero después alguien me dijo que no tenias mala intención.-
-¿Puedo saber quien?-
-Bueno, no eres el único que habla con pordioseros ¿Lo sabias?-

De manera inesperada la platica fluyó de manera natural, tan natural que no lo parecía. Yo me hundía en cada palabra y Ella parecía realmente interesarse en lo que yo tenia que decir. Hablamos de mil cosas: Los negocios de su padre, los tejidos de su madre, las hermanas que estudiaban en Bruselas, mi empleo en la herrería con mi padre, mi hermano y su afán por tirar botellas con mensajes al mar... Tanto que me resulta difícil recordar.

La noche cayó, caminamos un poco, las lamparas en las calles ya iluminaban un poco gracias a las velas de parafina y los ojos de Isabel me contaban historias de amor y de sosiego. Y eso era mas de lo que podía pedir. La acompañe hasta su casa, el único sonido en el aire era el de su madre cantando una canción sobre aves que se van y no vuelven, me puse frente de ella y dije:

-Ha sido una tarde esplendida.-
-Si, a mi también me lo pareció.-
-¿Puedo verte mañana?-
-No lo se, normalmente me negaría, pero hay algo en ti que me hace decir que si.-
-Entiendo, entonces te buscaré mañana al atardecer.-

Y así lo hice. Todos los días durante un mes justo al atardecer me paraba bajo sus ventanas con un ramo de lirios blancos a esperar que ella se asomara, y cuando por fin lo hacia solo nos veíamos a los ojos, solo nos veíamos, sentíamos el placer de cada palpitar, de cada segundo, y eso era amor. Caminábamos bajo la luz de los candelabros, bebíamos vino y mirábamos las estrellas. Amaba a Isabel, amaba como me hacia sentir, amaba lo que era, pero sobre todo amaba lo que eramos.

De pronto un día caminando por la costa, ella me soltó la mano, antes de poder decir algo me di cuenta de que Isabel estaba llorando, el sol en el horizonte agrandaba sus lagrimas, era casi como si pudiera ahogarme en ellas y dejar que me consumieran fundiendo sus minerales con los míos.

-¿Que pasa?-
-Emiliano, hay algo que no te he dicho.-
-¿Algo como que? Me preocupas.-
-Mi padre insiste en que me vaya al colegio para señoritas con mis hermanas en Bruselas. Me embarco mañana.-
-¿Hace cuanto que lo sabes? ¿Porque no habías dicho nada?.-
-Lo se hace una semana, solo no sabia como decirlo.-
-¿Volverás?-
-No.-
-Pero no puedes estar en el colegio toda la vida.-
-Mi padre me ha arreglado con el hijo mayor de su mayor cliente.-
-¿Te volveré a ver?- Pregunté ya con lagrimas en los ojos
-No lo sé.-
-¿Escribirás?-
-No, Emiliano, no te atores conmigo, debes seguir adelante. Por ahí esta la mujer indicada para ti, y esa no soy yo, solo abre bien los ojos y la encontraras, te lo prometo.-
-Pero no quiero a nadie mas, te quiero a ti Isabel.-
-Ya hablé, solo abre bien los ojos.-

Regresamos a su casa en silencio, al llegar noté que todo estaba a oscuras. Ella me dijo que sus padres estaban en un baile por el aniversario de bodas del alcalde, me invitó a entrar y tan pronto como cerramos la puerta nos tomamos a besos y avanzamos hasta la habitación principal. Hicimos el amor de una manera celestial, caso animal: las caricias, los besos, los rasguños, los susurros en la oscuridad, mis manos recorriendo cada centímetro de su cuerpo como si no hubiese un mañana, como ella arrojaba su sexo como el mar avienta una ola. Creo que nunca lo podré olvidar.

Después de nuestro encuentro ella dijo que sus padres volverían pronto y que debía marcharme. Caminé solo a casa, tuve que escabullirme ya que mis padres nunca supieron que me fui en primer lugar, no es que fueran malos padres, solo eran algo distraídos. Me senté en mi cama y no pude evitar llorar desconsolado, me sorprendió no despertar a nadie, quizá creyeron que era un par de gatos en pleno rito de apareamiento, yo que se.
La noche corrió y la mañana resplandecía en el horizonte, cuando la luz golpeó mis ojos debieron haber sido las diez de la mañana y yo no sabia en que momento me había quedado dormido, solo recordé que Isabel dijo que zarparía temprano en la mañana. Cogí mi camisa por apenas un poco, salí de mi casa y corrí como loco hasta los muelles.

Por las calles todos me veían como si estuviese loco o algo así, casi atropello a un par de ancianas, a un marinero y a unos tres perros pero llegué por poco, Isabel ya estaba zarpando, corrió hasta la popa del barco y grito algo, pero no pude escuchar mas que “¡Mi promesa!” y recordé lo que había dicho la noche anterior “Por ahí esta la mujer indicada para ti, y esa no soy yo, solo abre bien los ojos y la encontraras, te lo prometo.”. Regresé a la fuente y me senté a pensar en todo.

Algunas personas me llaman crédulo, por creer en la promesa de Isabel. Pero son personas que han perdido la fe, la fe en algo en lo que yo creo fervientemente. Le llaman casualidad, afinidad, engaño o compensación. Yo solo le llamo amor. Y desde ese día me siento en esa precisa fuente para buscarlo.Si eso me convierte en un inocente, un credulo o un idiota ya no me importa mas.


                                                                              Abraham Paz